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Truena elección de Morena

Truena elección de Morena

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Truena elección de Morena
Testigo fiel
Por: Jesús Torres

La disputa por la candidatura presidencial de Morena entró en la recta final con una cerrada competencia entre Marcelo Ebrard y Claudia Sheinbaum.

Aunque en la víspera el ex secretario de Relaciones Exteriores se fue con todo contra la ex jefa de gobierno de la Ciudad de México a quien acusó de utilizar viejas prácticas de acarreo, uso de programas sociales y el aparato de Estado para hacerse de la candidatura.

En otras palabras, Marcelo Ebrard sacó a flote el cochinero que se practica en el partido de López Obrador en la selección del abanderado que competirá en la sucesión de 2024.

Y de paso se llevó entre las patas de los caballos al inquilino de Palacio Nacional quien con el proceso interno buscaba legitimar a su ‘corcholata’ favorita.

Como se dice en el argot político, se trató de una jugada a doble banda, pero que tendrá consecuencias para el ex secretario de Relaciones Exteriores en sus aspiraciones políticas.

Pero eso no es todo, el reclamo de Marcelo Ebrard fue secundado por el hermano de AMLO, Pío López Obrador quien lo respalda en sus aspiraciones.

En un video que hizo circular en redes sociales acusó que el proceso interno de Morena estaba viciando de origen.

Y es que según dijo, al amparo del gobierno federal se está aplicando un operativo de Estado a través de las estructuras de los programas sociales de la Secretaría del Bienestar para favorecer a un aspirante al estilo del PRI de los 80’s.

Si bien se encuentra cerrada la competencia entre Sheinbaum y Ebrard, quien lleva la de perder en este desencuentro, es el ex secretario de Relaciones Exteriores al ventilar una cargada desde el oficialismo a favor de la ‘corcholata’ favorita del tabasqueño.

Si destapar el estiercolero al interior de Morena para salpicar a Sheinbaum y bajarla de las preferencias era la intención de Ebrard, no se cree por donde se le quiera ver, que vaya a darle resultados.

Se trata más bien de una ida sin retorno que lo coloca con un pie fuera del partido y el cobijo del mismísimo López Obrador.

En ese escenario no se dude ver a Marcelo Ebrard contendiendo en el 2024 bajo las siglas de otro partido o como candidato ciudadano. Al tiempo.


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