Movilizaciones anuncia el magisterio de Chiapas


Chiapas.- En Chiapas, la Asamblea Estatal Democrática de la Sección 40 del magisterio ha anunciado una nueva jornada de lucha que promete escalar en las próximas semanas.
Con el despliegue de brigadas informativas y la organización de movilizaciones regionales, el movimiento magisterial busca visibilizar sus demandas y sumar aliados estratégicos antes del arribo de contingentes a la Ciudad de México.
La estrategia no es improvisada. Según Héctor Solís Espinosa, secretario general de la Asamblea Estatal Democrática, la decisión fue tomada en una asamblea estatal, donde se acordó intensificar las acciones desde las distintas regiones del estado.
“Ahorita vamos a empezar los brigadeos para consolidar… ya están en distintas regiones, donde se está hablando con padres de familia, comunidades y organizaciones populares que también nos respaldan”, señaló el dirigente.
El magisterio chiapaneco acusa al Estado de reprimir sus manifestaciones y de no atender las demandas históricas del movimiento. Para Solís Espinosa, la represión es evidente y ha cobrado víctimas.
“Es responsabilidad del Estado el fallecimiento del compañero normalista”, afirmó, aludiendo a hechos recientes que han aumentado la tensión social en la entidad.
Conflicto magisterial no se limita a Chiapas
Sin embargo, el conflicto no se limita a Chiapas. Las movilizaciones magisteriales se inscriben en un contexto nacional donde el Gobierno Federal ha intentado apaciguar los ánimos con promesas de aumentos salariales y mejoras en las condiciones laborales.
Pero para Solís Espinosa, estas medidas no son más que paliativos insuficientes:
“No hay ningún incremento que supere el índice inflacionario… no hay salario que ajuste ante los precios actuales. Sabemos que son acuerdos con la cúpula charra, una forma de desmovilizar”.
El reclamo por la reinstalación de docentes cesados por razones políticas, la exigencia de condiciones dignas de trabajo y la demanda de atención en salud se suman a una agenda política y social que ha sido postergada por años.
“Ya van más de tres años que tienen a nuestros compañeros cesados. Son dos compañeros que están fuera”, subrayó Solís Espinosa.
En este escenario, la pregunta es inevitable: ¿Cómo reaccionará el Gobierno ante un magisterio chiapaneco decidido a mantener la lucha? Mientras tanto, el reloj avanza y los contingentes ya se preparan para hacer oír su voz en la capital del país.